jueves, 26 de julio de 2012

Viento del Mar 1997 Edward Gordon 1940


Viento Del Mar
Una habitación y una ventana por la que entran la luz y el viento y desde la que se divisa el mar al fondo.


Colgado de la pared el cuadro de Johannes Vermeer, “El astrónomo” en el que se ve al sabio en su habitación, delante de la ventana, iluminado por la luz que penetra por ella. El astrónomo también tiene un cuadro colgado de la pared. Un mapa náutico.

Dos épocas, dos vidas, dos habitaciones, la luz, el sol, el mar.....
Edward Gordon nació en Ocean City, Nueva Jersey en 1940 y recibió un BA de la Universidad de Rutgers.
En los últimos 20 años ha recibido numerosos honores y premios que incluyen: Cubierta de arte y la función del articulo en la Revista del artista , 07 2003 y ganador de la revista Artistas, mayo 1995 la competencia de cubierta. Cubra el arte y la difusión del centro, la revista yanqui, de marzo de 2000 y marzo de 2001.
El trabajo de Edward aparece en el 2001 Enciclopedia Ilustrada del artista. También ganó el primer premio en la división horizontal de la competencia Revista de arte Artistas de 1993, y finalista en el 1994 para las Artes de la competencia de Parques.

Edward Gordon Ballroom Limited Edition Canvas
Salon


Edward fue nombrado Pintor del Año en 1997/98 de la revista Choice Awards Spotlight del lector en Portsmouth, NM. Trabajo de Gordon también ha aparecido en noviembre de 1983 la revista American Artist, el libro de 1996 del Norte de luz, Animar pinturas con luz, el libro de 1996 del Norte de luz, materiales artisticas, y enero, 1997.
En 1997, el Sr. Gordon comenzó a publicar sus propias impresiones Giclée. En la actualidad, ha publicado 30 giclée ediciones, de las cuales 13 están ya agotadas! Sus pinturas y grabados están incluidas en colecciones públicas y privadas de América del Norte y Europa.


Edward logra una precisión completa y esmerada en su representación de texturas, colores y formas. Al igual que la fotografía que él deliberadamente se suavizan los contrastes fuertes de la imagen sin menoscabo de sus formas. Se suaviza el dibujo acotado con tal perfección que es imposible de detectar en sus dibujos.


Edward crea una belleza tranquila de una escena simple con nuevos ojos dando al espectador una idea de lo que sintió al ver a la inundación de luz a través de las ventanas y las sombras y los colores emitidos por los objetos en los interiores.
Debido a la increíble precisión y detalle que figura en cada una de las pinturas de Edward, que es capaz de producir de 4 a 6 imágenes por año.


Edward Gordon Music Room III Limited Edition Canvas
Musica Sala III


Él es un consumado dibujante, con un ojo que representa a sus temas. Su soledad evoca todos los sentidos: el olor y los sonidos del océano, el tacto de los objetos, con puertas y ventanas que se abren a un incesante oportunidades.
"Mi meta es hacer pinturas realistas, por lo que los espectadores se dibujan en el espacio imaginario y participación en la sensación de paz que tratar de incorporar en cada obra.


Edward Gordon Solstice Limited Edition Canvas
Solsticio de


Disfruto de las sutilezas de la reflexión de la luz, combinados con detalles arquitectónicos que se ubica entre el realismo y el el surrealismo. Hay algo místico pero serena a la luz tranquila se encuentra en los espacios interiores que se presentan en armonía con el efecto luminiscente en el cielo. "
Edward Gordon Still Waters Limited Edition Canvas
Still Waters
       


Maribel Alonso Perez
26 julio 2012

martes, 24 de julio de 2012

El Rabino con el Gato 1912 Natalia Goncharova



Rabino con el gato
Oleo sobre linzo 100.2 x 92 cm.


A pesar de su estancia fuera de su país natal, Goncharova nunca olvidaría sus raices y sus vivencias, algo que también le pasó a su compañero Larionov y que quedó reflejado en muchas de las obras de ambos.



Seguramente, una de esas vivencias que a ella la afectarían siendo una niña, serían los sucesivos "pogroms" o persecuciones que los judíos sufrieron en la rusia zarista desde 1881, año en que es asesinado el zar Alejandro II atribuyéndose su muerte a los judíos, hasta 1892 en que son expulsados de Moscú recrudeciéndose posteriormente estas persecuciones durante las dos primeras décadas del siglo XX.



En este cuadro, de clara influencia fauvista, Goncharova pinta a un rabino acariciando a un gato mientras unos hombres salen con unos sacos cargados a sus espaldas. Seguramente, la escena corresponde a uno de esos "pogrom" en el que unos judíos abandonan apresuradamente sus hogares llevándose sus pertenencias mientras el rabino acaricia a su gato por última vez antes de marchar él también. La mano de Dios aparece por la esquina superior izquierda.



El cuadro pretende ser un recuerdo y un mensaje sobre el sufrimiento y la intolerancia religiosa que ella percibiría y que plasmó en 1912.


Natalia Sergeevna Goncharovawas un ruso artista de vanguardia (cubo-futurismo), pintor, diseñador de vestuario, escritor, ilustrador y escenógrafo. Su tía abuela fue Natalia Pushkina, esposa del poeta Alexander Pushkin.


Natalia Goncharova nació en la aldea de Nagaevo cerca de Tula, Rusia en 1881. Estudió escultura en la Academia de Arte de Moscú, pero volvió a la pintura en 1904. Ella se inspiró profundamente por los aspectos primitivos del arte popular ruso y trató de emular en su propio trabajo, mientras que la incorporación de elementos del fauvismo y el cubismo. Junto con su esposo Mijail Larionov se desarrolló por primera vez Rayonismo. Ellos fueron los progenitores de los principales de la exposición de la cola antes de la revolución rusa de vanguardia la organización de la burra de 1912 y que muestra con el grupo Der Blaue Reiter, en Munich el mismo año.


La cola del burro fue concebido como una ruptura deliberada de la influencia del arte europeo y el establecimiento de una escuela independiente rusa de arte moderno. Sin embargo, la influencia del futurismo ruso es mucho más evidente en las pinturas posteriores de Goncharova. Inicialmente preocupada con la pintura de iconos, y el primitivismo de origen étnico ruso arte popular, Goncharova se hizo famoso en Rusia por su trabajo futurista como el ciclista y sus obras Rayonist posteriores. Como líderes de los futuristas de Moscú, organizaron veladas provocadoras de conferencias en la misma línea que sus homólogos italianos. Goncharova también fue involucrado con el diseño gráfico - escribir e ilustrar un libro de estilo futurista.


Goncharova fue miembro del grupo Der Blaue Reiter grupo de vanguardia desde su fundación en 1911. En 1915, comenzó a diseñar trajes de ballet y conjuntos en Ginebra. Sus diseños para la Liturgia de ballet: Seis alas Serafín, Ángel, San Andrés, San Marcos, etc Natividad se iniciaron en 1915. La liturgia fue encargado por Diaghilev con Goncharova, Léonide Massine e Igor Stravinsky. Se mudó a París en 1921 donde diseñó una serie de escenografías de los Ballets Rusos, Sergei Diaghilev. También muestra en el Salon d'Automne en 1921, y participa con regularidad en el Salon des Tuileries y el Salon des Indépendants. Ella se convirtió en un ciudadano francés en 1939.


Maribel Alonso Perez
25 julio 2012

lunes, 23 de julio de 2012

Giovanna Tornabuoni 1489-1490 - Domenico Bigordi (Ghirlandaio



Retrato de Giovanna Tornabuoni
Fecha: 1489-1490

Técnica: Técnica mixta sobre tabla .
Medidas: 77 x 49 cm
Ubicación: Museo Thyssen-Bornemisza, Madrid


Este panel de lujo es un buen ejemplo de los retratos del siglo XV florentino. Artistas de la época siguió los dictados clásicos: las proporciones del cuerpo se idealiza, mientras que las caras quedan desprovistos de expresión se espera transmitir carácter. En este retrato de medio cuerpo, la modelo aparece de perfil estricto, con los brazos doblados y las manos entrelazadas. En el fondo, una selección de objetos personales aparece dentro de un marco arquitectónico simple. El cartellino a la derecha lleva parte de un epigrama de Marcial y la fecha de su muerte, en números romanos. El modelo ha sido identificado como Giovanna Tornabuoni, sobre la base de un medallón de Niccolò Fiorentino mostrando su imagen y su nombre. Ella también se retrata de cuerpo entero en la Visitación fresco pintado por Ghirlandaio para la capilla Tornabuoni en la iglesia de Santa Maria Novella (Florencia).
Ghirlandaio comenzó su carrera como orfebre. Según Vasari: "de la costumbre de dibujar constantemente, [que] adquiere una gran agilidad, habilidad y destreza, por lo que muchos dicen que mientras que él era lento como un orfebre, cuando pintó la gente del campo o cualquier persona que pasaron por su estudio, inmediatamente capturado su imagen ". Vasari también señaló que, "esto está demostrado por innumerables retratos de su mano en la que se ve una verosimilitud sorprendente". Encontramos referencias de Vasari en su texto a la habilidad de Ghirlandaio en este género pictórico.

Giovanna Tornabuoni es uno de los retratos más atractivos y fascinantes de la colección Thyssen-Bornemisza. Esta bella imagen está sobre un fondo con un nicho que contiene varios objetos que se refieren a los gustos refinados del que está sentado y el carácter. La joya del dragón, dos perlas y un rubí, que forma un conjunto con el pendiente que cuelga de un cordón de seda alrededor de su cuello, se refiere a su vida pública. Este broche de dragón se equilibra en el otro lado por el libro de oraciones y collar de cuentas de coral que se ha identificado como un rosario, ambos de los que se destaca su piedad y su vida interior. Entre ellos es un cartellino con parte de un epigrama de Marcial (XXXII) titulado A un retrato de Antonio Primo y la fecha debajo. Dice así: "El arte, si tan sólo pudiera reproducir el carácter y el espíritu. No habría ningún retrato más fino del mundo ".

Esta imagen es un ejemplo clásico de la Florencia del Quattrocento retrato en el que la modelo posa de pie, de perfil estricto y bustlength con los brazos en reposo y se unió a las manos. En la cara y el cuerpo de las características y proporciones son idealizada. En el presente ejemplo, esto es evidente tanto en las líneas que crean el cuello delgado y la forma del cuerpo y en las características inexpresivos y perfecta. Al igual que en otros retratos de esta época, el ideal de belleza se utiliza para describir Giovanna Tornabuoni está basada en los principios teóricos y ejemplos tomados de la antigüedad clásica, que los artistas de esta fecha se combinan después con las características individuales de la modelo en particular.

La identidad del retratado fue establecido a través de las medallas de ella, como la que se atribuye al grabador Niccolò Fiorentino en la National Gallery of Art de Washington, en el que Giovanna se representa de perfil con una joya en el cuello y una inscripción con su nombre. La medalla fue comisionado posiblemente en relación con su matrimonio. Ghirlandaio también le representa en uno de los frescos de la serie ejecutadas en el presbiterio de Santa Maria Novella, encargado por el padre de Juana-en-ley y pintado por Ghirlandaio entre 1486 y 1490. En estos frescos Giovanna ocupa un lugar importante en el episodio de la Visitación . Situado a la derecha de la composición, que está a la cabeza de una línea de tres cifras. Aunque se muestra de cuerpo entero, su pose, la vestimenta y los accesorios son los mismos que en el panel actual.

Giovanna degli Albizzi se casó con Lorenzo Tornabuoni el 15 de junio 1486. Nacido el 18 de diciembre de 1468, murió dos años más tarde, el 7 de octubre de 1488, durante el parto. Para Jan Lauts el retrato actual es anterior a la aire libre en Santa Maria Novella y pudo haber sido el modello para ese trabajo. John Pope-Hennessy, sin embargo, consideró que era más tardar el fresco y ser un retrato póstumo en el que la fecha de la cartellino es el de la muerte de Giovanna.

La pintura, que se encontraba entre las posesiones de la familia Tornabuoni en su palacio en Florencia, entró en la propiedad de la familia Pandolfini en el siglo 17. Más tarde fue en la colección del barón Achille Seillière y la princesa de Sagan. En 1878 se registró en Brighton en la colección de Henry Willet, de donde pasó a la de Rodolphe Kann. Adquirida por J. Pierpont Morgan en 1907, que entró en la colección Thyssen-Bornemisza de la Morgan Library, Nueva York, en 1935While. fue en la Pierpont Morgan Library de una foto antigua de la Sala de West tomadas antes de 1913 muestra el panel en su marco actual, que aparece en un caballete en un lado de la sala rodeado de otras obras de la colección.


Maribel Alonso Perez
23 julio 2012

sábado, 21 de julio de 2012

La Violación 1869 Esgar Degas




La violación, Interior
Autor:Edgar Hilaire Degas
Fecha:1868-69
Museo:Museo de Arte de Filadelfia
Características:81 x 116 cm
ArteHistoria


Acostumbrados como estamos a las delicadas imágenes de ballet, carreras de caballos o representaciones de ópera, esta desconcertante escena pintada por Degas hacia 1868-69 resulta impactante. El lienzo permaneció durante más de cuarenta años en el taller del pintor y a él se refería como "mi pintura de género", pudiendo estar destinada al mercado inglés, un mercado en el que las temáticas de este tipo gozaban de una interesante acogida. Los especialistas han buscado referencias literarias para esta obra, refiriéndose a novelas de Zola o Duranty como fuente más directa. Se ha apuntado a "Therese Raquin" del primero, obra en la que Thérese y su amante asesinan al marido, relacionado esta composición con el capítulo en el que la nueva pareja pasan su primera noche de bodas, un año después del parricidio. Hofmann (1991) considera que no debemos buscar fuentes literarias para esta escena sino que estaríamos ante una "allégorie réelle".

En la zona derecha de la composición nos encontramos a un hombre de pie, en una desafiante postura, con las piernas separadas y una penetrante mirada que sugiere su estado de tensión. De espaldas, con la combinación blanca resbalando sobre su hombro izquierdo y posiblemente llorando, se halla la mujer, en una postura con la que parece esconder su vergüenza. Junto a la cama, tirado en el suelo, podemos observar un corsé, mientras que en la mesa reluce un collar junto a un costurero abierto. En estos objetos han querido ver los expertos el mensaje de la obra: cómo la joven ha vendido su honra por una joya pero en el momento de entregarla se ha arrepentido, apareciendo el miedo y la culpa, lo que la lleva a dar la espalda al hombre. Si éste es el tema de la escena enlazaría con los asuntos recogidos en algunos cuadros de los Pre-rafaelitas como Hunt o Rossetti, pinturas de género con grandes dosis de enigma a las que tan aficionado era el público inglés.

Degas representa la escena en un reducido espacio, consiguiendo aportar una mayor carga emotiva y dramática al asunto. Las diagonales organizan la composición -la cama, la alfombra, incluso la mirada del hombre sobre la mujer- recordando las escenas de los maestros del Louvre a los que Degas admiraba. También encontramos curiosos contrastes como la cama intacta frente al desorden de las ropas; el espejo absorbiendo los reflejos que emite la chimenea; el hombre vestido y la mujer semidesnuda; las tonalidades oscuras de él y las claras de ella. Las tonalidades rojizas ocupan un papel determinante en el conjunto: las rosas que decoran la pared, simbolizando posiblemente la pasión; el rojo de la luz de la chimenea, el forro de seda de la maleta. Pero será la luz la auténtica protagonista, consiguiendo gracias a los efectos lumínicos aumentar la violencia de la escena, especialmente gracias a colocar al hombre en una zona de penumbra mientras que la mujer tiene la espalda iluminada por la lámpara que observamos en la mesa. Esta violencia lumínica y contextual ha sido la responsable del subtítulo de la obra: Violación, título que recibió en 1912 y que posiblemente no fuera el sugerido por Degas.

Maribel Alonso Perez 21 julio 2012

jueves, 19 de julio de 2012



Almuerzo de remeros
Pierre-Auguste Renoir,
Año 1881
Óleo sobre lienzo 129,5 cm × 172,7 cm
• Impresionismo 
Colección Phillips, Washington DC, Estados Unidos


Almuerzo de remeros (1881, en francés: Le déjeuner des canotiers) es un cuadro del pintor impresionista francés Pierre-Auguste Renoir, que se conserva en la colección Phillips, en Washington DC

El cuadro muestra un grupo de amigos de Renoir descansando en una terraza de la Maison Fournaise sobre el río Sena en Chatou, Francia. El pintor y el mecenas, Gustave Caillebotte están sentados abajo a la derecha. En el fondo se vé a la futura esposa de Renoir, Aline Charigot, jugando con un pequeño perro.

En este cuadro Renoir capturó una gran cantidad de luz. Como se puede apreciar, la mayor cantidad de luz viene de la gran abertura en el balcón, atrás del hombre en camiseta y sombrero. Las camisetas de ambos hombres en el fondo y el mantel de mesa actúan en conjunto para reflejar esa luz y enviarla a través de toda la composición.

El cuadro tuvo un papel protagónico en la película "El fabuloso destino de Amélie Poulain" (2001) de Jean-Pierre Jeunet.

La obra está resuelta en un momento de plena madurez pictórica y es de una gran envergadura por la gran cantidad de personajes que aparecen en el cuadro, siendo muchos de ellos auténticos retratos. Esto unido al juego con la luz, la disposición de las figuras en la escena y la sensación de vida que se respira en el conjunto hacen de esta obra una de las más atractivas del pintor.

Las figuras presentan en general un gran detalle mientras que el paisaje del fondo está más abocetado. Se sitúan bajo un toldo que evita la entrada de la luz solar, provocando sombras coloreadas típicas del Impresionismo. Tras el toldo, en la parte superior izquierda, se aprecian los contornos del puente del ferrocarril que, construido tras la revolución industrial, permitía a los parisinos realizar escapadas los fines de semana a tranquilos parajes como el del cuadro.

 

Detalle del bodegón

Como los remeros y sus compañeras acaban de comer, sobre el mantel se reconocen un magnífico bodegón con los restos de la comida: botellas, frutas, platos, copas…, demostrando el pintor su facilidad para este género.

Gracias a los contrastes y armonías con colores complementarios, se consigue una gran luminosidad. Por ejemplo, se observan contrastes entre violeta y amarillo: vemos vestidos amarillos cuyas sombras son violetas y también vestidos azules que ganan luminosidad gracias a que sus luces son violetas y cerca hay un sombrero o una camisa amarilla.

 

Alfonsine Fournaise

El fondo es mayoritariamente verde y por eso tiene muy cerca un toldo rojo (complemento del verde), con muchos matices a otros colores cálidos, produciendo una luminosidad fantástica.

Podemos apreciar también las influencias de los colores entre elementos cercanos perfectamente pintadas por Renoir, como en el caso del sombrero de paja del señor Fournaise, su copa está roja influenciada por el toldo. Así mismo, el mantel en la esquina derecha de la mesa tiene todos los colores de lo que tiene cerca: el pantalón, la silla y la mano del personaje sentado.

La composición resuelta por grupos de triángulos reafirma la tranquilidad y serenidad que Renoir sabía transmitir en sus obras.
Linealmente hablando, se combinan las rectas del toldo, sus varillas de soporte y la barandilla, con las curvas de las figuras, tonel, sombreros, etc. consiguiendo un gran equilibrio.



Aline Charigot

En resumen, es una obra muy equilibrada tanto desde el punto de vista cromático como compositivo, con una gran luminosidad del color. Es una de las obras más importantes de Renoir, una verdadera obra maestra del Impresionismo y de la pintura en general.


Maribel Alonso Perez
19 julio 2012

lunes, 16 de julio de 2012

Piccadilly Circus 1912 - Charles Ginner




Charles desmotadora 1878-1952

Piccadilly Circus
Año 1912
Pintura al óleo sobre lienzo
813 x 660 mm

Inscrita 'C. Desmotadora 'en la parte inferior derecha verde pintura de aceite, y las comunicaciones en los diversos vehículos y edificios.


Piccadilly Circus es una famosa plaza de Londres construida en 1819 para organizar el tráfico en la intersección entre Regent Street y Picadilly y en la que se colocó en 1893 la fuente en memoria del filántropo Shaftesbury así como la estatua de Eros.

Los anuncios luminosos por los que es famosa, comenzaron a instalarse en 1910 y la estación de metro de Picadilly Circus se inauguró en 1906 convirtiéndose la plaza progresivamente en un lugar tremendamente concurrido y con un tráfico caótico, fruto de la modernidad del Londres de primeros de siglo.

Charles Ginner fue un pintor perteneciente al colectivo de artistas ingleses postimpresionistas denominado "Camden Town Group", un colectivo integrado por 16 miembros liderados por el pintor Walter Sickert en cuyo estudio de Camden Town se solían reunir frecuentemente durante el periodo comprendido entre los años 1911 al 1913.

Cuando Charles Ginner pinta este cuadro en 1912, Piccadilly Circus es ya la zona más transitada de Londres y en él, intenta reflejar el caos y el trasiego de esta plaza en la que una vendedora de flores, situada en un extremo de la plaza, parece acorralada por el tráfico circulante así como empequeñecida al ser observada desde los asientos superiores de esos grandes autobuses rojos que anuncian en su carrocería los espectáculos musicales de éxito.

El foco central de este cuadro de Piccadilly Circus es una "chica Coster ', o una flor-vendedor, sentado en el centro de este famoso cruce de Londres. El silencio vendedor de flores contrasta con el ajetreo y el bullicio a su alrededor - la figura corriendo de la mujer elegantemente vestida, el taxi disparaba en el primer plano y los dos autobuses con sus juntas de rutas transitadas y anuncios

La obra de Charles Ginner así como toda la del "Camden Town Group" crea un retrato de gran parte del Londres anterior y contemporáneo a la Primera Guerra Mundial constituyendo un legado de gran interés histórico y artístico.

Esta obra se conserva en la Tate Britain, London, donde en el año 2008 tuvo lugar una importante retrospectiva de la obra del grupo.


Maribel Alonso Perez
16 julio 2012

viernes, 13 de julio de 2012

Lydia en un tapiz telar 1881 - Mary Cassatt




Lydia Cassat fue la hermana mayor de la pintora impresionista estadounidense Mary Stevenson Cassatt.



Soltera, igual que Mary, cuando en 1874 su hermana se trasladó definitivamente a Paris decidida a hacerse un hueco en el grupo de los impresionistas Lydia decidió marchar con ella.



Juntas compartieron los momentos de aceptación de Mary por parte de los impresionistas franceses, sobre todo de Renoir y Degas, trabando este último una gran amistad con ambas y pasando Lydia a convertirse en la modelo habitual de su hermana que la retrataría en numerosos lienzos y en distintas situaciones.



En 1877 Lydia contrajo una grave insuficiencia renal que la llevaría a la muerte en 1882 pero, a pesar de la enfermedad que la fue minando, ella siguió posando para su hermana y se cuenta que, cuando pálida y debilitada por la enfermedad contemplaba los cuadros en que había quedado plasmada y transformada, decía: “Posar, después de todo, es estar de acuerdo con una forma de encantamiento.”



Este cuadro en que Mary Cassatt la pintó en 1881, bordando o tejiendo con un pequeño telar, fue el último en el que Lydia posó para su hermana falleciendo unos meses después.



La vida de Lydia fue novelada por la escritora Harriet Scott Chessman en su obra “Lydia Cassatt Reading the morning paper”, un titulo inspirado en el cuadro de ella, “Lydia reading"



"Lydia at a tapestry loom" se conserva en el Flint Institute of Arts, Flint, Michigan.



Maribel Alonso
13 julio 2012

miércoles, 11 de julio de 2012

La mañana de San Valentin 1865 John Callcott Horsley


 
Oleo sobre lienzo 1865


Firmado y fechado: JC Horsley 1865 (centro, sobre el mantel).

Una joven sostiene una carta de San Valentín en la mano. Su cabeza, enmarcada por una magnífica cascada de cabello, se echó hacia atrás a medida que compara su imagen en el espejo sobre la mesa con las cualidades atribuidas al parecer, a ella por su admirador en la carta.

El público victoriano admiraba mucho la naturaleza romántica de esta pintura.
John Horsley Callcott era un expositor principal en la Real Academia. Fue especialmente conocida por sus escenas de Shakespeare y otros poetas.

Esta es una versión de la pintura exhibida por Horsley en la exposición 1863 de la Real Academia. Existen muchas versiones, hay una en la Galería de Arte de Wolverhampton y también uno en piedras de toque, Rochdale (Galería de Arte de Rochdale).
Presentado a los Walker Art Gallery colecciones de George Audley en 1925.



Detalle de la firma sobre el mantel

John Callcott Horsley fue un pintor londinense del siglo XIX, no demasiado conocido en el resto de Europa debido tal vez a su no excesiva producción, entre la que destaca la decoración mural que realizó en la Casas del Parlamento de Londres en 1844 así como la decoración interior del Westminster Hall.

Por lo que realmente se conoce a Horsley es por haber diseñado la primera tarjeta de felicitación navideña ("christma") por encargo de un tal Henry Cole, un funcionario inglés con una gran visión comercial.

En este cuadro, Horsley pinta a una bella y aristocrática joven, vestida con un camisón de seda y sosteniendo una carta con una de sus manos mientras se mira entre orgullosa y altiva en un espejo que descansa sobre un tocador en el que también está su adornada bata en terciopelo rojo.

Sobre su regazo, un perrillo juguetea y destroza las cartas de amor que se supone le acaba de entregar su enamorado el día de San Valentin a través de la doncella o ama de llaves.

Es evidente que el enamorado o enamorados, ya que son varias las cartas que aparecen en el cuadro, no tienen mucho que hacer a juzgar por esa sonrisa displicente y el tratamiento cruel al que las cartas son sometidas.

Una mala mañana en el día de San Valentín, para aquel o aquellos que esperaban ser correspondidos.

Este cuadro, pintado en 1865, se conserva en la Walker Art Gallery de Liverpool.



Maribel Alonso Perez
11 julio 2012

lunes, 9 de julio de 2012

Muchacha en la ventana 1925, Salvador Dalí




Muchacha en la ventana Salvador Dalí, 1925
Óleo sobre cartón piedra • Surrealismo
Medidas 105 cm × 74,5 cm
Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, Madrid, España


Muchacha en la ventana es un famoso cuadro del artista español Salvador Dalí pintado en 1925. Está hecho mediante la técnica del óleo sobre cartón piedra, es de estilo realista y sus medidas son 105 x 74,5 cm. Se conserva en Madrid, en el Museo Reina Sofía.

El cuadro pertenece a la etapa formativa de Dalí, cuando el artista tenía veinte años y el surrealismo no había influido todavía de manera apreciable en su pintura.

Representa a la hermana del artista, Ana María, a la edad de diecisiete años, asomada a la ventana, de espaldas, en la casa de vacaciones que la familia poseía en Cadaqués, a la orilla del mar. Dalí realiza un trabajo de gran uniformidad cromática y sencillez en la composición, donde la muchacha nos introduce en el paisaje que ella contempla.

Claramente, los valores cromáticos de la obra son azules, al igual que en las obras tempranas de Picasso las cuales estaban formadas sólo por gamas de azules.

La muchacha sufre algunas desproporciones notables como sus pies, los cuales son muy pequeños. La hermana de Dalí aparece en otros cuadros contemporáneos y posteriores del pintor, pues fue la modelo del pintor hasta que conoció a Gala en 1929. La pintura estuvo en la primera exposición del autor en la galería Dalmau de Barcelona, en noviembre de 1925.

Ana pasaba horas mirando desde aquella ventana la bahía de Cadaqués. Eran las mismas horas que su hermano Salvador dedicaba a pintarla a ella de espaldas con el mar al fondo juntando dos cuadros en uno solo.

Estaba lejos de imaginar los millones de seres que contemplarían años y siglos después, sus rotundas formas de la adolescencia y aquel mismo mar que ella observaba.


Maribel Alonso Perez
09 julio 2012

domingo, 8 de julio de 2012

Au Moulin de la Galette 1892 Ramon Casas




Au Moulin de la Galette Ramon Casas, 1892
Óleo sobre lienzo • Modernismo catalán
Medidas 117 cm × 90 cm
Museo de Montserrat, Monasterio de Montserrat, España


Au Moulin de la Galetta  es una pintura al óleo realizada por Ramon Casas en 1892 en París y actualmente se encuentra expuesta en el Museo de Montserrat, dentro del Monasterio de Montserrat.
Los cafés son uno de los motivos favoritos de la pintura que se realizada en París en los últimos años del siglo XIX. Se trataba de una temática ligeramente escandalosa que presentaba ambientes y personajes poco recomendables: una mujer sola en un café bebiendo y fumando era una imagen inequívoca para el público de la época. Casas recuerda nuevamente a Manet, tanto en la iconografía como en la interpretación en un solo plano del espacio de la figura y el fondo esbozado del local, como en el espacio del bar de Folies-Bergère. Para esta pintura posó Madeleine de Boisguillaume, que fue modelo de Toulouse-Lautrec y por esto también se conoce a esta obra con el nombre de La Madeleine.

El Moulin de la Galette es un antiguo molino de viento situado en el corazón de Montmartre que, en un principio, se usaba para moler el trigo y que tomó su nombre de la pequeña galleta de maíz de centeno (galette) que se ofrecía junto con un vaso de leche a los excusionistas o paseantes que visitaban la colina de Montmartre.

Hacia 1830 el antiguo molino fue transformado en un cabaret con una sala de baile y unos jardines convirtiéndose en un lugar de reunión de todos los artistas, pintores, poetas y músicos que habitaban en sus proximidades.

El Moulin fue retratado por muchos pintores tales como Renoir, Van Gogh, Lautrec, Picasso, Rusiñol y Ramón Casas.

En este cuadro, pintado en 1892, Ramón Casas retrató en el interior del Moulin de la Galette a una mujer que, sentada ante una copa de licor, tal vez absenta, y con un cigarro puro en su mano derecha, mira con una grave expresión de tristeza, amargura o preocupación hacia algún punto del local como esperando ver aparecer a alguien que probablemente no vendrá.

La modelo se llamaba Madelleine de Boisguillaume y era una aspirante a actriz y modelo de artistas, la cual, mantenía una relación con el escritor Edouard Dujardin con quien llegaría a tener en 1896 un hijo llamado Emile. Dujardin la dejó ese mismo año para casarse con Germanine Teisset de la que se separó en 1901 reanudando su relación con Madelleine.

Esta mujer, fue modelo habitual de Casas durante su estancia en París hasta 1894 en que este regresa a Barcelona, apareciendo retratada en varios cuadros suyos como “La asidua del Moulin de la Galette”, “Joven decadente” y “Jalousie” y tal vez en la serie de escenas intimistas femeninas que realizó en Barcelona en su periodo 1894-1895.

Madelleine fue también modelo en varias obras de Santiago Rusiñol y de Toulouse - Lautrec, modelo que fue confundida con Jeanne Fontaine en “Mujer con una piel” y que la estudiosa de Casas, Mercedes Palau-Rives demostró que era Madelleine.

La mujer fue un tema recurrente en la obra y la vida de Ramón Casas. Sus modelos participaron de su vida. Así, con Clotilde (Clo-Clo), la hija del dueño de una tienda de pinuras en París mantuvo una relación amorosa; Madelleine fue su musa parisina y por último, Julia Peraire, una vendedora callejera de lotería, fue al final su gran amor y compañera hasta su muerte.

Este cuadro se puede contemplar en el Museo del Monasterio de Monserrat, Barcelona


Maribel Alonso Perez
08 julio 2012

La Lectura 1932 de Pablo Ruiz Picasso



La Lectura
Año: 1932
Ólero sobre lienzo
Medidas: 45 x 57


El lienzo 'La lectura' del pintor malagueño Pablo Ruiz Picasso fue vendido este martes por la casa de subastas Sotheby's de Londres por más de 25,24 millones de libras (más de 29,7 millones de euros), según informó a Europa Press un portavoz de la casa de subastas.
El cuadro 'La lectura salía a subasta por un precio de entre 12 y 18 millones de libras (entre 14 y 16,5 millones de euros) fue vendido dentro de un lote dedicado a la pintura modernista e impresionista y pertenecía a un coleccionista privado americano.
'La lectura', un óleo sobre lienzo, fue pintado en 1932 por el pintor malagueño y está dedicado a su amante y musa Marie-Thérèse Walter, a quien conoció cuando la joven tenía 17 años y con la que mantuvo una relación secreta mientras estaba casado con la bailarina rusa Olga Koklova.




La Lectura
Año: 1932
Óleo sobre lienzo
27 x 32 cm


Este cuadro, de idéntico título, año de realización y similar composición al que se conserva en el Museé National Picasso de París catalogado como “La lecture” es, también un retrato de su musa y amante Marie Therese Walter.

Pintado en enero de 1932, Picasso nos muestra a Marie Therese voluptuosamente adormilada en un sillón tapizado en rojo y adornado con tachuelas. Sobre su regazo descansa un libro abierto que, algunos estudiosos, han interpretado como un símbolo sexual.

A Marie Therese Walter la conoció Picasso en 1927 cuando ella tenía tan solo 17 años y él casi 50 y estaba casado con Olga Koklova, una antigua bailarina de los "Ballets Russes".

Marie Therese se convirtió en su modelo y amante secreta durante varios años, manteniéndola en un apartamento que compró para ella en la Rue de La Boetie, cerca de donde él vivía y en él que la amaría y pintaría en secreto así como en el castillo de Boisgeloup, un pequeño chateau que había comprado en 1931 para trabajar en sus esculturas y que compartía con el escultor Julio Gonzalez, uno de los pocos amigos íntimos que llegaron a conocer su secreto.

A Marie Therese la pintó en decenas de cuadros entre 1927 y 1932 como por ejemplo: “Muchacha joven delante de un espejo”, “El sueño”, “Mujer con libro”, “La lectura”, etc, y fue poco después de pintar este último cuando, en una exposición de sus obras más recientes, Olga Koklova se dió cuenta de que Picasso pintaba a otra mujer al no reconocer ella sus propios rasgos en este cuadro.

Olga Koklova lo abandonó y Marie Therese pasó a ser la compañera oficial de Picasso con el que tuvo una hija en 1935 a la que llamaron Maya.

Con la proximidad de la guerra civil española, Picasso manda a Marie Therese y su hija con su madre y él continúa en París donde se vuelve a reencontrar con su mundo de la bohemia. Una tarde, en un café de Saint Germain, su amigo Paul Eluard le presentará a una joven llamada Dora Maar que tomará el puesto de Marie Therese como amante y como modelo en la vida de Picasso.

Marie Therese Walter se suicidó el 20 de octubre de 1977 ahorcándose en el garaje de su casa de Jean les-Pins.

Este cuadro se vendió en 25,2 millones de libras esterlinas (29,6 millones de euros) en una subasta de la casa Sotheby's. Según Sotheby's, hasta siete interesados intentaron comprar el cuadro y después de seis minutos de pujas en la sala de ventas y por teléfono, la obra fue vendida a un comprador telefónico anónimo.


Maribel Alonso Perez
08 julio 2012

sábado, 7 de julio de 2012

La Novia del Viento 1914 Oskar kokoschka.




Ubicación : Öffentliche Kunstsammlung, Basilea
Estilo artístico : Expresionismo
Técnica : Óleo sobre lienzo
Dimensiones : 181 cm x 220 cm.
Pintor: Oskar kokoschka


Detalles de la imagen 'La novia del viento o La tempestad. Oskar kokoschka. 1914'
  • Amante: Alma Mahler fue la amante de Kokoschka durante mucho tiempo. Su relación se basaba prácticamente en el sexo, que les obsesionaba. Su pasión era tal que se dieron cuenta que se amaron y ella huyó de él. Kokoschka se convirtió en un hombre triste, pintando su estudio de negro y realizando este gran lienzo en homenaje a su ferviente amante.
  • Expresionismo: No hay mejor forma de representar los sentimientos que el expresionismo, el cual usaba trazos gruesos, líneas duras, poco color en general. El pintor exprimía sus sentimientos y los lanzaba al lienzo, para hacernos partícipes a los espectadores de lo que ocurre en su interior. La fuerza expresiva de esta Tempestad nos hace suponer que la pérdida de su amante fue muy dura, brusca.
  • Locura: La huida de Alma Mahler supuso la pérdida de la razón del artista y esto lo podemos ver en el lienzo, que no tiene color, ni alegría, simplemente son trazos angustiados porque se había enamorado de ella. Por eso, en el cuadro posan en un momento para él eterno, como es abrazados el uno al otro.
  • Sentimientos: Aunque se ha tachado a veces el expresionismo como brutal, como un movimiento depravado (Hitler lo consideró así), en este lienzo podemos ver la capacidad emotiva del movimiento. Se puede ver en el lienzo el interior, lo subjetivo, ya no se dedican a pintar un árbol, sino a sentir ese árbol.

Alma Mahler, de soltera Alma Marie Schindler, escribió en su autobiografía: “Mi vida fue bella, Dios me dio la oportunidad de conocer las obras geniales de nuestro tiempo antes de que abandonaran las manos de sus creadores. Mi destino es bendito y justificado por habérseme permitido, aunque fuera por un tiempo, sostener con mis manos los estribos de esos caballeros de la luz.”

Realmente, Alma Mahler conoció de primera mano, el genio y parte de la obra de sus tres maridos, el compositor y director de orquesta austríaco, Gustav Mahler, el arquitecto alemán y fundador de “La Bauhaus”, Walter Gropius y el novelista, dramaturgo y poeta checo, Franz Werfel, así como la del pintor austríaco expresionista, Oskar Kokoschka con el que mantuvo una intensa y turbulenta relación de casi tres años de duración.

Con Gustav Mahler, su primer marido y casi veinte años mayor que ella, se casó en 1902 y tuvo dos hijas una de las cuales moriría con solo cinco años. Esto afectó gravemente a su relación de pareja, inestable ya desde sus origenes, aunque mantuvieron unido su matrimonio hasta la muerte de él en 1911.

En 1915 se casó con Walter Gropius al que había conocido antes de la muerte de Mahler y con el que mantuvo una relación adúltera conocida por el compositor. Su matrimonio duró solo unos pocos años ya que, en 1917 ella conoció al que sería su gran amor, Franz Werfel, escritor que llegó a ser candidato al Nobel, y con el que vivió en California hasta 1945, año del fallecimiento de Werfel.

En el intérvalo entre la muerte de Mahler y su matrimonio con Gropius, conoció en 1912 a Oscar Kokoschka, surgiendo entre ellos un amor apasionado que duraría cerca de tres años en los que se alternaron los momentos más idílicos con otros atormentados por los celos, el intento de dominio y posesión por parte de él y la cada vez mayor exigencia y altanería por parte de ella.

Durante ese periodo, él realizó un gran número de pinturas y dibujos en las que expresaba su estado de ánimo y su amor y pasión hacia ella a través de las imágenes que representaba.

Llegó un momento en que esta relación tormentosa comenzó a rozar la locura por lo que, Alma Mahler, decidió romper la relación con Kokoschka.

Para él, aquello fue un terrible mazazo. La ruptura de un amor tempestuoso pero único.

A finales de 1913, a punto de terminar su relación, Kokoschka pintó este cuadro, “La novia del viento” en el que retrata a ambos tumbados en una especie de barco a la deriva en un mar tempestuoso e igual de agitado que su amor.


Maribel Alonso Perez
07 julio 2012

jueves, 5 de julio de 2012

Ulrich Wolf




Pintor alemán que lleva largos años residiendo entre nosotros, Ulrich Wolf es un estudioso de la luz; la analiza y la convierte en razón y argumento de su obra. Poco importa el tema, siempre desarrollado dentro de un realismo absoluto; lo que se impone un punto en el que nace la luz que va extendiéndose, perdiendo intensidad y creando un eje poderoso y fuerte. Su dibujo, excepcional, se une al color; le basta, a veces, un simple vaso de agua o un viejo fanal de resonancias árabes; otras las flores o el paisaje. Pero la luz es lo que confiere una atrayente magia a su obra.

Nació Widman en Gävle, Suecia; estudio de 1966 a 1971 en la Escuela de Bellas Artes de Hoveskou, en Gotebog y también estudío escultura junto a Arvid Bryth. Un día descubrió las islas Baleares y no se lo pensó mucho; desde 1992 reside en Alcúdia y crea su obra bajo el sol del Mediterráneo, cosa que es más cómoda, climáticamente, que hacerlo bajo el frío del norte europeo.
Cultiva Peter Widman el informalismo; pero no es uno más, no es de los que llena telas a lo loco. Hay algo que le distingue y diferencia. No basta con una simple mirada para captar sus obras, hay profundidad en ellas, hay algo especial. Posiblemente sea la compensación de las zonas de color que une a la luz; sus cuadros, no en vano es también escultor, juegan con el concepto no sólo del volumen sino también con el del relieve óptico. No importa lo que quiera expresar, en realidad sentimientos y emociones.
Pintor de soluciones vigorosas, empastadas y líricas; utiliza con frecuencia la espátula para expresarse, para sugerir. Y en ocasiones, como en el presente caso, es más que suficiente para que el espectador se sienta satisfecho.




Blonda con lámpara

Enero 1998 Estudio (Barcelona)

En silencio, sin oropeles, Ulrich Wolf viene realizando, desde hace ya años, una labor pictórica densa. Se trata de un arquitecto alemán que hace lustros eligió Cataluña como su lugar de residencia y a la pintura como razón de su vida. Es la suya una obra de realización lenta y que goza de seguidores que la esperan. Por ello queda fuera de los circuitos habituales de exposiciones ya que desde hace tiempo le resulta imposible reunir la obra precisa para una muestra.
Wolf ama la pintura precisa, exacta; es un descritor realista que confiere a sus obras un toque especial gracias a la luz. Es un enamorado de los efectos luminosos, de las transparencias, de los cristales, de las telas que brillan suavemente cuando la luz la acaricia. Son composiciones en las que acentúa un leve barroquismo, preocupado siempre por los problemas de composición. Sus cuadros nacen del análisis, del estudio, de planteamientos cerebrales; importa por encima de todo la problemática técnica y la resolución de los problemas que se plantea. Se recrea en los detalles, posee la perfección del miniaturista de buena ley y por ello puede hacerlo; no cae en efectismos, pero encuentra el predominio de la luz sin forzarla.
Wolf realiza una pintura intemporal, eterna. Sólo depende de la elevada cota de calidad que alcanza.

 

Playa Aro

Septiembre 1994 - Agora 3 (Sitges)

La opción dramáticamente onírica y surrealizante que nos ofrece el artista polaco Ladislav María Wagner revela un temperamento creador cuya capacidad inventiva se manifiesta y evidencia al contemplar sus obras que presente bajo el sugerente título “Metamorfosis”.
En el espacio mental expresado por el pintor hay gritos en el silencio, pánico general, dramatismo intenso, omnipresente y una calidad inventiva realmente ejemplar. Diferentes elementos son unidos por Wagner haciendo aparecer una nueva realidad que entronca directamente con los sueños convertidos en llamada plástica de atención sobre lo que nos rodea. En realidad, su pintura es un grito de protesta expresado a menudo de manera grave y trágica.
Sobre un dibujo preciso Wagner desarrolla su teoría del color y de la técnica puesta al servicio de convertir su obra en expresión de sentimientos, de ideas.

Si algo caracteriza a Ulrich Wolf, es la entrega diría que monacal a la pintura, el culto reverencial y obsesivo que rinde a la realidad. Es un detallista absoluto que deja a un lado la frialdad de hiperrealismo y consigue otorgar acento cálido a sus exhibiciones pictóricas. Al mismo tiempo conoce el secreto de la luz y lo acentúa, juega con ella, crea transparencias, suaves sombras, en un despliegue de posibilidades y la convierte en un verdadero espectáculo pictórico, alcanzado unos resultados fuera de serie. Todo es consecuencia de una entrega total, de dedicar, sin prisas ni pausas, a cada cuadro el tiempo que requiere.

 

Niños

Realismo absoluto el de Ulrich Wolf. Y más allá de la realidad, la atmósfera, el juego de luces que se van diluyendo, un punto central en el que una vela, una lámpara o un simple reflejo se convierten en el punto central de la obra. Le basta con la luz para cautivar. Pintura realizada con técnica absolutamente perfeccionista, mimada, cultivando calidades, sabiendo que todo es importante. Ulrich Wolf, que lleva largos años radicado entre nosotros, ama el silencio, la quietud; desaparece de escena y deja que sea su obra la que por él hable. El resultado es siempre espectacular.


ULRICH WOLF (Gal Art 283 Octubre 2007)
L’Escala d’Art (Sitges)

Un mínimo punto de luz es suficiente para que se produzca el milagro. Ulrich Wolf ha aprendido, -por haber estudiado profundamente a los maestros de la luz, Rembrandt el primero de ellos- a convertir cada uno de sus cuadros en un milagro lumínico. Wolf, pintor alemán radicado en Cataluña, -arquitecto que abandonó la arquitectura por la pintura-, cultiva una pintura minuciosa, detallista, precisa, con el toque de miniaturista; obra de realización paciente, minuciosa, mimada, en la que se plantea problemas y los resuelve.

 

Lámpara con partitura

La luz es un poderoso imán que atrae la atención y el interés de Ulrich Wolf, pintor alemán que lleva largos años radicado entre nosotros. Es un artista minucioso, perfeccionista, libre, entregando a cada una de sus obras el tiempo que precisan, que es mucho. Pintor de detalle absoluto, de perfección, rimando el tema siempre desde un punto central de luz y a partir de allí desarrollando toda una teoría de claroscuros. Hace suya una realidad especial, compone sus telas centrado en el misterio de lo lumínico y a través de ello nos ofrece el descubrimiento de la gran verdad de la pintura, que es pura y simplemente saber pintar. Y él sabe.

Dicen los médicos, que hay que abandonar el tabaco. Pero White tiene las ideas claras. Afirma que “la vida puede ser una mierda pero con un cigarrillo en la mano puedo resistirla”. Si tiene razón o no ya llegará a otras conclusiones, pero por el momento convierte el humo del cigarrillo, el ambiente de los fumadores, en tema y argumento de su obra, explicada a través de un expresionismo de alegre colorido, incluido el collage, hasta alcanzar una obra compleja en la que partiendo de la realidad alcanza dicción propia.

 

Cesto de feria

Ulrich Wolf se mantiene ajeno a las modas de vanguardia, su obra se puede definir como pintura hiperrealista que transmite un mensaje intimista y poético a través de la espiritualidad de la luz y la fuerza sugestiva del color. Así lo afirma la crítica especializada que ha opinado sobre su obra, como J. Llop de la revista de arte "Gal-Art", J. Cadena del Periódico, F.Gutiérrez de la Vanguardia y otros críticos destacados de Madrid, Málaga y de Renania-Palatinado.
Ha expuesto diversas veces en su tierra natal (Alemania), y también en Madrid (Torres-Begué) y en Málaga (Benedito).
Con frecuencia presenta su obra en Cataluña , en exposiciones individuales y colectivas como : Barcelona (Jaimes, Augusta, El Corte Inglés,Gaudi), Sitges ,Gerona, Blanes (Arcada), Bellver de la Cerdaña, etc.
También participó en los concursos: Premio Valentí de Sitges (1994/1996) y Premio Vila de Palamós (1994) donde fue seleccionado.


Maribel Alonso Perez
05 julio 2012

miércoles, 4 de julio de 2012

Miss La La en el Cirque Fernando 1879 Edgar Degas




Artista: Edgar Degas
Año: 1879
Tipo: Pintura al óleo
Dimensiones: 117,2 cm x 77,5 cm
UbicaciónNational Gallery , Londres


Miss La La en el Cirque Fernando es una pintura de Edgar Degas , el francés impresionista artista, ahora en la colección de la Galería Nacional en Londres , Inglaterra . Se muestra el acróbata de la señorita La La colgando de una cuerda por los dientes en el Cirque Fernando , en Montmartre , París.
La pintura fue comprada por los Consejeros del Fondo Courtauld en 1925. Se volvió de la Tate Gallery de la Galería Nacional en 1950.

El Circo Fernando fue un primitivo circo ambulante, fundado en 1873 por un jinete belga llamado Ferdinand Beert e instalado en un solar vacío en el Boulevard Rochechouart, al pie de Montmartre, y en el que posteriormente se edificaría un edificio circular con la apariencia que muestra el lienzo de Degas.

Desde 1875, este local fue conocido como el Circo Fernando hasta que, por necesidades económicas de su dueño, se hizo cargo de él en 1897 un payaso español llamado Medrano que trabajaba en este circo con lo que este lugar pasó a denominarse Circo Medrano, continuando con este nombre hasta su demolición en 1973.

“Miss La La”, cuyo verdadero nombre era el de Olga Kaira, era también conocida artísticamente como “La femme canon”, “Olga la mulata” o "La Princesa de África” y sus números de acrobacia y fuerza eran realmente espectaculares.

Uno de sus números más asombrosos consistía en colgarse boca abajo de un trapecio al que se sujetaba solo con las piernas mientras que, con los dientes, mantenía otro trapecio al que se iban subiendo primero un niño, después una mujer y posteriormente un hombre, todo ello sin que su trapecio dejase de oscilar por las alturas del Circo Fernando.

Otro ejercicio muy aplaudido consistía en sujetar con los dientes una cadena unida a un cañón que era disparado con gran estruendo.

El ejercicio que pinta Degas en este cuadro consistía en ser izada hasta la cúpula del circo por medio de una cuerda a la que “Miss La La” se aferraba con su mandíbula mientras ascendía girando sobre ella misma.

Degas, gran aficionado al circo igual que muchos de sus colegas impresionistas, quedó maravillado con el espectáculo y con la fortaleza de esta mujer y en enero de 1879 realizó una serie de dibujos previos incluyendo un pastel que se conserva en la Tate Gallery de Londres y que culminaron con esta pintura.

Olga Kaira, polaca de nacimiento, era mulata y con una gran mata de pelo negro y aunque en el cuadro, Degas la pinta con medias, se aprecia en los brazos que el pintor ha anaranjado el color de su piel, tal vez para homogeneizar el conjunto cromático, cosa que no hace en el estudio realizado a pastel en el que la dibuja como la mulata que era.

Este cuadro que se exhibió en la cuarta exposición impresionista celebrada en abril de 1879 se conserva en la National Gallery, London.


Maribel Alonso Perez
04 julio 2012

El doctor Paul Gachet 1890 Vicent Van Gogh

File:Portrait of Dr. Gachet.jpg

El doctor Paul Gachet (primera versión)  
Vincent van Gogh, 1890 Óleo sobre lienzo
• Postimpresionismo 68 cm × 57 cm
Colección privada, Tokio, Japón



El Retrato del doctor Gachet es un cuadro pintado al óleo sobre tela del pintor holandés Vincent van Gogh. Data del año 1890. Es una de las pinturas de Van Gogh más reverenciadas, desde que alcanzó un precio récord en 1990.
Hay dos versiones auténticas de este retrato, ambas ejecutadas en junio de 1890 durante los últimos meses de vida de Van Gogh. En ambas se muestra el doctor Gachet sentado ante una mesa y haciendo descansar su cabeza sobre su brazo derecho, pero pueden diferenciarse con facilidad.

Paul Gachet era un médico parisino homeópata y psiquiatra, amante del arte: conoció a Vincent Van Gogh a través de su hermano, Theo e inmediatamente los dos se encontraron en sintonía por tener una visión del arte muy semejante. Era un pintor y grabador aficionado y, además, protegió a varios artistas como Pissarro y Cézanne. Fue uno de los primeros compradores de cuadros de Cézanne, formando una importante colección que en 1952 su hijo donaría al Estado francés.

Después de que le dieran el alta a Van Gogh en el Hospital de Saint-Rémy, acudió a Auvers-sur-Oise, donde el doctor Gachet estaba dispuesto a atenderlo. El pintor acudía con frecuencia a casa del médico y éste aceptó posar para Vincent, que desde hacía tiempo buscaba un modelo para retratar del natural.

File:Portrait of Dr. Gachet (second version).jpg

El doctor Paul Gachet (segunda versión)
1890, óleo sobre lienzo, 68 x 57 cm
Museo de Orsay, París

Trabajando juntos durante la realización de la obra los dos obtuvieron un resultado extraordinario. El cuadro es extremadamente innovador: Van Gogh abandonó la pose estática y convencional de los cuadros precedentes. El triste rostro del doctor es «la expresión desencantada de nuestro tiempo» afirmación de Van Gogh en una carta dirigida a su colega y amigo Paul Gauguin (carta n.º 643 de junio de 1890).

El doctor aparece «pensativo, casi preocupado, con un leve escepticismo». Van Gogh se sentía muy próximo al doctor, de quien decía que era «al menos tan nervioso como yo»
Van Gogh escribió a su hermano en 1890 sobre la pintura:

"He hecho un retrato de M. Gachet con una expresión melancólica, que bien podría parecer una mueca a aquellos que lo vean... Triste pero amable, y aún así clara e inteligente, así es como muchos retratos deberían hacerse... Hay cabezas modernas que podrían mirarse durante mucho tiempo, y que se volverán a ver, quizás, con nostalgia, cien años despues."

En cuanto a la forma concreta en que lo representó, escribió a Theo: «la cabeza con una gorra blanca, muy rubia, muy clara; también las carnaciones de las manos son muy blancas, un traje azul y un fondo azul cobalto» (carta n.º 638, datada el 4 de junio de 1890).

En el retrato el artista propone un fuerte contraste cromático. en primer plano, sobre la mesa, junto al libro una planta de digital. El digital en la pintura es una planta de la que se extrae un medicamento para tratar de ciertas afecciones cardíacas; es por lo tanto un atributo de Gachet como médico.
La parte superior de la obra está separada por una línea ondulada.

La segunda versión del retrato fue ejecutada en el mismo año 1890, poco después del primero. En esta versión del cuadro, donada al Museo de Orsay de París por los hijos del doctor Gachet, Van Gogh ha eliminado (a diferencia del primer retrato) el vaso y el libro, haciendo resaltar la planta de digital sobre el fondo rojo, tratando de modo más sumario el fondo.


Maribel Alonso Perez
04 julio 2012

lunes, 2 de julio de 2012

Retrato de Jaime Sabartés 1901- Pablo Picasso



Retrato de Jaime Sabartés, óleo sobre tela, 46 x 38 cm, Museo Picasso de Barcelona).


Nacido en Barcelona en 1881, Jaime Sabartés fue un escritor, escultor, comerciante, marchante, periodista y profesor de instituto antes de pasar a convertirse en el secretario personal de Picasso, su gran amigo desde que tenía dieciocho años y al que permanecería ligado hasta su muerte en 1968.

Picasso y Sabartés se habían conocido en "Els Quatre Gats", un local de Barcelona en el que se reunía toda la intelectualidad de la época y del que ambos eran clientes habituales. Su amistad continuó al marchar Picasso a París, ciudad a la que iría Sabartés a pasar una temporada hasta su marcha a Guatemala a la búsqueda de nuevos horizontes laborales.

En 1934, Jaime estaba atravesando una grave crisis económica por lo que Picasso le ofreció el hacerse cargo de sus asuntos personales a lo que Sabartés aceptó instalándose en París junto a Picasso.

Se comenta que este, no era excesivamente generoso con el sueldo que le pagaba pero si le iba regalando pinturas, grabados y dibujos que Sabartés fue juntando hasta llegar a tener una abundante muestra de la obra del pintor malagueño.

En 1960, Jaime Sabartés decidió donar todas sus obras a una institución y siguiendo los consejos de Picasso donó toda su colección al que luego sería el Museu Picasso de Barcelona y cuyos fondos ampliaría el mismo Picasso unos años más tarde.

A lo largo de su vida, Picasso retrató en numerosas ocasiones a Jaime Sabartés y uno de sus primeros retratos fue este en el que se ve a Jaime sentado delante de una gran cerveza y con cara de aburrimiento. Se cuenta, que Sabartés estaba recién llegado a París en 1901 y había quedado con Picasso en el "Café de La Lorena", cerca del Museo de Cluny. Sabartés que había llegado antes, a pesar de padecer una severa miopía se había quitado las gafas con lo cual, su rostro, presentaba un gesto entre aburrido y adormilado que provocó una gran hilaridad a Picasso cuando llegó al café acompañado de sus amigos y sorprendió a Jaime en esa pose con la que luego le pintaría reviviendo su expresión.

Al parecer, Jaime, al ver el cuadro una vez pintado exclamó que el allí retratado era “el fantasma de su soledad”. Sin él saberlo había servido de modelo durante su ensoñación.

Este cuadro se conserva en el Pushkin State Museum of Fine Arts, Moscow.

Picasso hace dos pinturas más de Sabartés. Sabartés deja Barcelona y se traslada a París. Se reúne con Picasso a finales de octubre (Pablo Picasso, Retrato de Jaime Sabartés - Le Bock, París, septiembre-octubre, óleo sobre tela, 82 x 66 cm, colección The Pushkin State Museum of Fine Arts, Moscú. Opinión de Sabartés en relación a esta pintura: “…es el espectro de mi soledad visto desde el exterior…”)(Pablo Picasso, Retrato de Jaime Sabartés, óleo sobre tela, 46 x 38 cm, Museo Picasso de Barcelona).



Maribel Alonso Perez
02 julio 2012

Juan Gregorio Lascano 1947 Pintor Argentino




Este trabajo recopilatorio está dedicado al pintor realista argentino Juan Lascano. Es uno de los artistas argentinos más afamados en los circuitos de la arte internacional, donde ha logrado insertar sus pinturas con éxito en subastas de Nueva York concurridas por acaudalados coleccionistas. Sus obras forman parte de la colección de Zurbarán, galería con la cual ha recorrido distintos puntos de la Argentina.

De personalidad deslumbrante, de generosa comunión con su público y sensitiva admiración por la naturaleza, Lascano ocupa un sitio privilegiado entre los cultores del realismo contemporáneo latinoamericano. Incansable, tan productivo como inspirado, sortea en los detalles aquellas dificultades que movilizan sus pinceles para definir colores, sombras, matices, texturas y, siempre, captando la cosa, no desde su materialidad, sino desde la luz que ésta devuelve a sus ojos.


El reposo. Óleo 60 x 90 cm. Obra de Juan Lascano

La inmaculada divinidad del ser elevado a las altas potencias sin pudor y sin culpa. Una forma más de un pensamiento expuesto a la consecución de un fin para rescatar lo simple, lo que estaba alejado del artificio.

Juan Gregorio Lascano, nació en 1947 y en sus 60 años supo agradar al público que goza con la expresión realista. Pintó su primer cuadro a los 10 años, montó su primera muestra a los 20 y su abuelo fue su primer cliente. Padre dos veces y esposo, su familia tiene un rol fundamental en su vida, desde que sus padres descubrieron su talento y
alentaron su inspiración, en su ciudad natal, La Plata.

Si hay algo que caracteriza a Juan Lascano es su genial trabajo con la luz, que es, evidentemente, una musa inspiradora que seduce al universo paseándose por las cosas, las situaciones y ahora hay que especificar: los paisajes de la Patagonia, pues son éstos los que cautivaron al artista haciéndole fijar residencia en Bariloche. Entonces queda por decir: Lascano en El Casco, oficia de artista local.

Lascano cree haber tomado la decisión de irse a vivir con su esposa a ese poblado rionegrino buscando nuevos aires para su vida. Más parece un designio del destino que trazó en Bariloche una conjunción de coordenadas que, como juego de "aquíes y ahoras", hizo que su encuentro con Zaldivar terminara en una obra mayor que sus pinturas: El Casco.



En la realidad su obsesivo temperamento, tal vez, desnudaba más a sus modelos sin llegar a la provocación. Esa mirada observadora dejaba entrever un alma de gran pureza que le daba un toque verdadero, inmerso en un realismo llevado al máximo grado.

Juan Lascano es un pintor realista argentino. ¿Por qué le gustaba pintar mujeres desnudas?. Porque, quizá, veía el paisaje en esos cuerpos, sus flores y bodegones. Como no existían reglas ni patrones, la autenticidad para este artista se demostraba en cada trazo conociendo a la perfección las técnicas de su propia obra.


Piel de Coral. Óleo, 70 x 50 cm. Obra de Juan Lascano

Obra de Juan Lascano. El desnudo femenino es erótico, en el más elevado sentido que tiene la palabra.
En él se revela toda la nobleza y todo el poder de atracción del cuerpo como eje del amor. Las formas del cuerpo de la mujer están cargadas de sugerencias, que me transportan al mundo clásico griego con sus columnas y sus ánforas.
(Juan Lascano)

Ya los antiguos hacían con la desnudez sus obras más perfectas sin imaginar que aquellos primeros pasos serían tomados como referentes para crear y para aumentar las pasiones en un tiempo diferente, pero siempre con el mismo sentimiento...

"EL ARTE NO TIENE LÍMITES, NO SABE DE PREJUICIOS Y SE LANZA A LA AVENTURA SIN IMPORTARLE LA CRÍTICA, LA MIRADA DE OTROS O EL FRACASO".

(Fragmento del ensayo histórico "Maestros en busca de la inmortalidad", de Luján Fraix).


Maribel Alonso Perez
02 julio 2012