Los álamos
1879-1880
Óleo sobre lienzo
Alt. 65; Anch. 80 cm
Este cuadro representa probablemente el exterior del parque del castillo de Marcouville, justo a proximidad de Pontoise. El interés de Cézanne por este paisaje puede estar relacionado con el hecho de que su amigo Camille Pissarro ya haya pintado en este lugar cinco años antes. La comparación se detiene aquí, sin embargo. La búsqueda paciente de soluciones suaves, propia de Pissarro, parece muy lejos de este cuadro impregnado por una poderosa energía.
Cézanne se interesa por el grupo de los altos árboles que bordean la Viosne. La dificultad consiste en hacer legible un paisaje de vegetación. Con este propósito, opone el aspecto rectilíneo de los álamos a las masas confusas de otros árboles. Entre las pinceladas oblicuas características de este periodo, el fondo blanco trasparece casi en todas partes y proporciona luminosidad y animación a la superficie del lienzo. Manifiestamente, Cézanne pretende superar la dificultad técnica de la representación de una perspectiva cuyo único motivo es el follaje.
La diferencia entre este paisaje boscoso y aquellos de la escuela de Barbizon es significativa. Tanto Cézanne, como Pissarro, representan a los árboles plantados por el hombre en lugar de aquellos que crecen "naturalmente". Introduce de este modo en sus composiciones el resultado de la actividad humana que organiza el paisaje, más que el crecimiento anárquico de la naturaleza.
Maribel Alonso Perez
18 enero 2012
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