Oleo sobre lienzo
Medidas 300 x 300
Renato Guttuso
(1911-1987), uno de los pintores más importantes y también uno de los
más cotizados en el mundo artístico del siglo XX italiano, nació en el
seno de una familia acomodada en la localidad siciliana de Bagheria aunque sería registrado en Palermo por problemas administrativos. Estudiante de Bellas Artes en Palermo, a los diecisiete años ya participó con éxito en su primera exposición colectiva. Influido principalmente por Courbet, Van Gogh y Picasso pronto su pintura sería conocida en toda Europa.
Desde sus comienzos, la pintura de Guttuso tiene una fuerte carga de manifiesto social característica del movimiento artístico “Corrente”, movimiento
formado por un grupo de pintores italianos entre los que él se
encuentra y desde el que se pretende criticar la cultura oficial y
mantener una fuerte oposición al fascismo que dominará Italia hasta el final de la Segunda Guerra Mundial. Guttuso se afiliará al clandestino Partido Comunista
italiano, partido al que sería afín hasta el final de sus días. Su obra
más polémica y casi motivo de excomunión fue el lienzo titulado “Crucifixión” en el que la figura de Cristo está medio tapada por uno de los ladrones y por una María Magdalena
desnuda mientras, en primer plano, aparecen unas siniestras botellas de
vinagre, un martillo y los clavos usados en la crucifixión. Guttuso escribiría en su diario: "este es el símbolo de todos los que soportan ultraje, cárcel y tortura por sus ideales".
Casado en 1947 con Mimisse Dotti a la que amó hasta el final de sus días, su pasión por las mujeres, hizo que le fuera infiel toda su vida, primero con una tal Caria Piro esposa de un político democristiano y luego durante casi 20 años con Marta Marzotto,
la esposa de un conde y empresario textil y que sería para él además de
su amante, su musa y la modelo a la que retrataría en infinidad de sus
lienzos.
Uno de los cuadros por los que es más conocido Renato Guttuso es por el cuadro que hoy traemos a este blog, “La Vucciria”.
Escribía Peter Robb en su libro "Medianoche en Sicilia" que: "Llegar
al Vucciria saliendo de un callejón estrecho y sinuoso es como salir de
entre bastidores al escenario en mitad de la representación" y realmente, no le faltaba razón. Todo el que pasa por la ciudad siciliana de Palermo y visita "La Vucciria", aunque este mercado ya no es lo que era cuando el pintor Renato Guttuso
lo plasmó en el lienzo del que hoy hablamos, queda impresionado por el
ambiente, el vocerío, los olores y el color que estallan en este antiguo
mercado de la carne situado en una de las zonas más deprimidas de la
ciudad y sometida hoy día a un lento proceso de rehabilitación.
El cuadro "La Vucciria" al que su amigo Leonardo Sciascia definió como "el sueño de un hombre hambriento",
ejerce sobre el espectador una atracción imposible de reprimir y hace
que se sienta como uno más de los personajes que recorren ese estrecho
pasillo entre puestos atiborrados de pescados, hortalizas, quesos o
embutidos mientras los vendedores vocean su mercancia o el carnicero
despieza la ternera suspendida de un gancho.
Guttuso fue un pintor realista expresionista pero su pintura está también cargada de símbolos. De "La Vuciria" el dijo que: "Es
una naturaleza muerta en la que los seres que por ella se mueven
también serán algo muerto algún día. Es un cuadro negro, que parece
pintado sobre un fondo negro. Quiero decir, en algún momento, mientras
pintaba, me di cuenta de todo lo que contenía, una abundancia de la
vida, y al final, un sentimiento destructivo."
En "La Vucciria"
varios de los personajes que aparecen en el cuadro son conocidos. Así,
el pescadero que sujeta la cabeza del pez espada es el propio Guttuso, la mujer de negro con una bolsa en la mano es su mujer Mimisse y el hombre del jersey amarillo es un escultor amigo de Guttuso.
La mujer de espaldas, la figura central del cuadro y sobre la que recae
la atención a primera vista del espectador, se trataría de su amante, Marta Marzotto.
Guttuso murió solo y multimillonario en la ciudad de Roma donde vivía y donde tenía su estudio, en el llamado Palacio del Grillo. Su mujer Mimisse había muerto poco tiempo antes y a su amante, la condesa Marta Marzotto, liada con un destacado miembro del partido comunista llamado Lucio Magri, se negó a recibirla antes de su muerte. Por los derechos a su herencia se entablaron querellas y juicios entre la condesa Marzotto, hoy en dia octogenaria y diseñadora de joyas y un hijo adoptivo de Guttuso pero, esa larga historia es demasiado larga para contarla en tan pocas líneas.
El cuadro de La Vucciria pintado en 1974, fue donado por el pintor a la Universidad de Palermo, pudiéndose contemplar en el Palacio Steri, antigua sede de la Inquisición española y hoy en día, sede del rectorado de la Universidad.
En este video se puede contemplar una detallada visión de este magnífico cuadro.
29 abril 2013
elpresley dijo...
ResponderEliminarEsta entrada está fusilada integramente de mi blog: Desde el otro lado del cuadro
sin citar la procedencia de la mismas y firmando dicha entrada con tu nombre.
Como bien sabes y así lo indica en mi blog, mis entradas están sujetas a una licencia de Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 España, por lo que te ruego procedas a borrarla de tu blog o al menos elimines tu firma y cites la procedencia de la misma (http://desdeelotroladodelcuadro.blogspot.com.es/)
El presley.